Cada objeto Kensei nace de una mezcla precisa y consciente. Utilizamos cemento de primera calidad, sin acelerantes, lo que permite un fraguado natural y una estructura interna sólida. Incorporamos áridos finos seleccionados, que aportan textura, carácter y homogeneidad, junto con aditivos colorantes que enriquecen la masa sin alterar su esencia mineral.
Las piezas de concreto están preparadas para un uso cotidiano e impermeabilizadas con selladores y barnices aptos para su contacto con alimentos, sin embargo requieren un manejo responsable: no recomendamos sumergirlas ni mantenerlas en contacto prolongado con agua, aceites o materiales grasos. No deben calentarlas en hornos o microondas ni rozar cubiertos sobre su superficie. Sugerimos contener alimentos secos o semisecos como frutas, snacks, frutos secos, galletas, panificados, golosinas, sushi, empanadas, quesos, etc. Evitá golpes, caídas, fricciones, humedad constante o exposición directa al sol, ya que pueden afectar su estructura, textura o tono.
Para lavarlas, usá una esponja o paño suave, seco o apenas húmedo (si es necesario con detergente común). Evitá productos abrasivos o químicos que puedan dañar la superficie con el tiempo.
Durante el proceso de fraguado, cada molde se sostiene boca abajo. Aún asi, mantenemos su base cubierta, evitando el contacto directo con el aire. Esa cara inferior puede presentar una textura sutil y diferente: no es un defecto, sino una huella del proceso artesanal que atraviesa cada pieza.
Por otro lado, nuestras velas combinan diseño, calidad y aroma en una fórmula pensada para acompañarte todos los días. Están hechas con cera de soja, cera de abeja y endurecedor vegetal que les da estructura sin resignar naturalidad. Además, les sumamos esencias aromáticas seleccionadas para crear fragancias envolventes que transformen cualquier ambiente.
Todos nuestros objetos están elaborados a mano con materiales nobles, respetando sus tiempos y cuidando cada detalle del proceso. Esta forma de trabajar, lenta y consciente, hace que cada pieza sea única. Pequeñas variaciones en el color, la textura o la forma no son errores: son parte de su identidad. Parte de su encanto está en aceptar cómo cambian, se desgastan o evolucionan con el uso.
Con solo un poco de atención, tus piezas Kensei van a acompañarte toda tu vida.